¿Es igual una clase online que presencial? ¿Se aprende lo mismo? ¿Cuál es mejor?

 Debido a la grave situación que estamos viviendo, no nos queda otra opción respecto a la enseñanza que alternar las clases online con las presenciales. Teóricamente, debería ser lo mismo una clase online que una presencial, pero a la hora de la verdad para nada lo son. Mientras que en una clase presencial tienes menos obstáculos para estar atenta y no perder el hilo, en las que son online cuesta mucho más no perder esa concentración debido a que tienes muchas más distracciones, entre las cuáles podemos destacar los móviles. También es cierto que algunas clases se hacen mucho más amenas que otras. Algo importante a destacar, es que en una presencial el profesor está bastante más atento a ti, cosa que es un punto a favor. Lo positivo que podemos sacar de estas clases online es que puedes por ejemplo dar clase de una forma más cómoda e incluso puedes comer cuando te apetezca.

Bajo mi punto de vista y experiencia, para nada se aprende lo mismo asistiendo a clases presenciales que a online. Cuesta bastante más comprender todo y eso es un gran impedimento, a lo que podemos añadir que muchas veces por mala conexión te pierdas partes de explicación y luego no sabes cómo continuar. Creo que para aquellas personas (en las que me incluyo) que nos distraemos con mucha facilidad, las clases online nos perjudican bastante. Por el contrario, creo que para aquellas personas que mantengan la concentración con mayor facilidad, las puede servir de bastante más utilidad, ya que son más cómodas. Hay que añadir que aquellas personas que no puedan permitirse comprarse un ordenador o cualquier dispositivo desde el cual poder seguir las clases, injustamente van a quedarse sin saber contenido, cosa que es muy negativa ya que tendríamos que estar todos en igualdad de condiciones.

Aunque concretamente para mí estás clases me sean de menos utilidad que las presenciales, hay que destacar el gran esfuerzo que están realizado los profesores, ya que ellos al igual que nosotros no están acostumbrados a estar hablando a la vez a una clase que a un ordenador y además no debe ser nada fácil. Esperemos que pronto podamos volver a la normalidad de siempre en las aulas (cosa que es algo difícil), ya que todos lo echamos de menos.